Viaje para el olvido

Crónica de un desastre anunciado:

El pasado fin de semana, la presidenta Dina Boluarte culminó su gira europea con un encuentro con el Papa Francisco en el Vaticano. La fotografía oficial con la que buscaban reforzar la imagen de la mandataria fue el broche de oro para una gira carente de una estrategia clara. El principal inconveniente para Palacio de Gobierno es que no se trata de solo una mala fotografía oficial. La presidenta Dina Boluarte viene arrastrando una gira de viajes en el extranjero que le han supuesto críticas y cuestionamientos, tanto a la interna del país como en el exterior. En más de una ocasión, se ha cuestionado el intento de hacer pasar citas casuales por encuentros bilaterales, como ocurrió con su viaje en Nueva York. Esto ha profundizado la crisis de imagen de la presidenta, la misma que ya era deficiente, con un desgaste y exposición innecesario.

Si se suma una estrategia sin un norte claro y una comunicación desfavorable, el resultado es negativo, como se ha visto. Ello, al punto que, este lunes, luego de la sesión del Consejo de Ministros, el jefe del Gabinete, Alberto Otárola, evitó la acostumbrada conferencia de prensa que realiza todas las semanas para anunciar los acuerdos adoptados y responder las preguntas de la prensa. Frente a lo que hubieran sido varios cuestionamientos, como la demora en el envío del avión presidencial para recoger a los peruanos en la zona de conflicto en Israel, una agenda trivial en Europa y una fotografía con el papa Francisco que terminó en memes y burlas, Otárola y sus ministros habrían preferido evitar a la prensa esta semana.

El respiro para el Ejecutivo en estos días provino de los congresistas Elvis Vergara y Raúl Doroteo, de la facción de ‘Los Niños’ de Acción Popular, además de Luis Kamiche (Cambio Democrático), tras el retiro de firma a la moción de vacancia en contra de la presidenta. Esto ocasionó que la moción no cuente con el respaldo del número legal de parlamentarios para proceder, por lo que pasó al archivo en el Congreso de manera definitiva. Sobre esta imagen habría dos lecturas. Por un lado, el retiro de las firmas podría significar una negociación particular, del Ejecutivo con los señalados. Por otro lado, podría haber sido iniciativa propia de estos parlamentarios el retiro de la firma, para abrir una ventana de acercamiento al Ejecutivo. Sea cual fuese, no existiría gratuidad o altruismo en este tipo de acciones.

Congreso, cueva de sorpresas:

La Comisión de Justicia aprobó un nuevo informe que recomienda destituir a los miembros de la Junta Nacional de Justicia (JNJ). Inicialmente, el primer documento señalaba que no había falta grave por parte de los miembros. Sin embargo, la presión de los diferentes sectores del Congreso, Fuerza Popular, Renovación Popular, Acción Popular, APP y Perú Libre, ocasionó que se pase a un cuarto intermedio, en el que se redactó las nuevas recomendaciones. El siguiente paso para estas bancadas es que, el nuevo informe redactado de manera exprés, se sustente ante la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales (SAC) con el objetivo de inhabilitar a los miembros del JNJ de la función pública. Esdras Medina (Unidad y Diálogo Parlamentario) será el encargado de sustentar el texto ante la SAC. Por su parte, la congresista Ruth Luque (Cambio Democrático) se mostró en desacuerdo con el informe aprobado y presentó un informe en minoría.

Por otro lado, el partido de Acción Popular notificará al Congreso de la expulsión de los congresistas Darwin Espinoza, Raúl Doroteo, Elvis Vergara, Jorge Flores, Juan Carlos Mori e Ilich López, investigados por el Caso ‘Los Niños’. La expulsión precisa que los congresistas no podrán usar el nombre del partido en el Congreso. En papel, esto podría ocasionar un cambio, con la posibilidad que los congresistas que renunciaron a la bancada, encabezados por Maricarmen Alva, y que están como no agrupados, puedan volver a integrar el grupo parlamentario del partido político en el que aún militan. Sin embargo, en la práctica ello no significaría un cambio en la dinámica de la correlación de las fuerzas políticas en el Congreso.

Por último, el congresista Luis Picón (Podemos Perú), fue detenido este martes tras no presentarse al inicio del juicio oral en su contra, por el presunto delito contra la administración pública. Ello podría significar para Picón el inicio de un procedimiento de desafuero del cargo en su contra. El parlamentario, electo por APP, pasó a integrar luego la bancada de Podemos Perú por lo que, en caso de ser desaforado, APP podría recuperar un escaño a su favor.