Toma de Lima, ¿éxito o fracaso?
Toma de Lima:
La tercera convocatoria de la ‘Toma de Lima’ movilizó, según estimó el Ministerio del Interior, a 21 mil personas a nivel nacional. Quienes organizaban y respaldaban la marcha esperaban que esta sea lo suficientemente contundente para seguir convocando a futuras movilizaciones. La ‘Toma de Lima’ no fue menor, como pensaba la derecha, ni tan masiva como pretendía la izquierda. La narrativa de la primera es calificarla como un fracaso; mientras los últimos buscan decir que fue un éxito.
¿Qué lectura se puede realizar sobre el 19 de julio? Por un lado, las facciones políticas, colectivos y rostros que aparecieron, a diferencia de las convocatorias de inicio de año, asemejan la movilización de ayer con las marchas antifujimoristas de años pasados. Se habría buscado dar la imagen de ser una marcha más plural, reflejo de una ciudadanía cansada, y no tan politizada, como el Ejecutivo acusaba. Sin embargo, los actores políticos que apoyaron la marcha carecerían de un peso real que haga incidencia en sus seguidores o simpatizantes. La falta de un liderazgo claro que movilice y canalice a la ciudadanía en general, además de la diversidad de agendas, ocasiona que las convocatorias continúen siendo dispersas y desorganizadas.
También se puede resaltar el trabajo realizado por las Fuerzas del Orden. Si bien hubo grupos que buscaron reacciones desproporcionadas de la Policía, ello no ocurrió; aunque Defensoría del Pueblo reportó 6 civiles y 2 policías heridos. La izquierda persistirá en criticar el actuar de la PNP, como narrativa para sumar adeptos en una nueva marcha.
¿Qué se puede esperar para los siguientes días? Lo más probable es que quienes convocan a estas movilizaciones busquen organizarse nuevamente para una fecha más cercana a Fiestas Patrias o incluso luego de la elección de la Mesa Directiva, aunque se espera otra convocatoria para este fin de semana. Además, continúan llegando delegaciones del sur del país a Lima. La izquierda se apalancaría en una narrativa mediática fuerte con el fin de generar indignación para el 28 de julio. El gobierno, por su parte, está apostando por el regreso de la Gran Parada Militar en la Av. Brasil, en un esfuerzo de mejorar la imagen de las Fuerzas del Orden y que la ciudadanía participe en estas celebraciones. En el Ejecutivo deben ser estratégicos, pues dar por concluidas las marchas, o insistir con mensajes contra los manifestantes, podría ser un error.
Cuenta regresiva:
Por otro lado, este lunes el congresista de Acción Popular Luis Aragón ganó la elección interna de la bancada para ser representante en una lista para la Mesa Directiva del Congreso. Inicialmente, Aragón ha sostenido reuniones con las bancadas de izquierda, buscando liderar una lista multipartidaria con estos grupos parlamentarios. Sin embargo, se ha abierto una ventana, cerrada hasta hace unos días por parte de los ‘Niños’, para negociar con la derecha una alianza para esta elección.
Este fin de semana será clave para la negociación de la derecha y le podrían extender una invitación para una lista presidida por Acción Popular, Fuerza Popular en la primera vicepresidencia, Somos Perú en la segunda. Avanza País estaría dispuesto a ceder la tercera vicepresidencia a Renovación Popular. Sin embargo, esta última bancada sostiene la postura de que, además de presidir la lista, no deberían negociar con una bancada de izquierda (o en este caso centroizquierda); mientras que Avanza País ha sido crítico de la facción de los ‘Niños’.
La observación de Aragón respecto a una lista multipartidaria con la derecha es que, efectivamente, será una alianza cortoplacista, y no le asegura contar con el respaldo de estas bancadas durante el resto del período legislativo, a diferencia de las bancadas de izquierda, con las que tiene un mejor entendimiento. Para el lunes el panorama debería ser más claro para la próxima elección para los grupos parlamentarios en el Congreso.