Desacuerdos, posturas indefinidas y listas fragmentadas.

Nueva Mesa Directiva, los antecedentes:

De cara al próximo inicio del período anual de sesiones, el Congreso se prepara para la elección de la nueva Mesa Directiva en un ambiente político con un nivel de confrontación que ha disminuido entre el Ejecutivo y Legislativo, en comparación a años anteriores. ¿Cuáles son los antecedentes de los anteriores procesos en el actual Congreso?

En 2021 se vio un bloque de centro y centro-derecha definido de Fuerza Popular, Avanza País, Alianza para el Progreso (APP) y Acción Popular. Renovación Popular ha mantenido una posición independiente sobre la elección de la Mesa Directiva, principalmente por decisiones unilaterales de su vocero, Jorge Montoya, quien hasta ahora considera que su bancada debe tener la presidencia del Congreso.

Sin embargo, Acción Popular terminó fragmentándose con una mayoría aliándose al bloque de centro-izquierda. APP se debilitó con la pérdida de integrantes, mientras Fuerza Popular ha tenido más desencuentros que encuentros con Avanza País y Renovación. Por su parte, la imposibilidad de ceder a un interés común hizo que la izquierda se fragmente en varias listas. Hasta el momento, ha primado el interés personal en la izquierda, cerrando el espacio a una negociación que permita que se presente una lista única.  

¿Qué factor nuevo hay este año, respecto a los anteriores? En esta oportunidad, habría bloques que estarían tratando de congraciarse y existen más ánimos de revancha en la actual oposición en el Congreso, lo que puede unir voluntades.

La correlación de las fuerzas:

¿Cuál es la actual correlación de fuerzas en el Congreso? Por un lado, en la derecha, la negociación de Fuerza Popular con Perú Libre, que permitió la elección de Josué Gutiérrez como defensor del pueblo, habría incluido el acuerdo que la bancada del lápiz se desmarque del bloque de la izquierda y vaya con una lista única. Por cuestión de números, la derecha necesita de APP. Por su lado, Renovación Popular y Avanza País, no se pondrían de acuerdo y son bancadas que usualmente están dispuestas a ceder poco. Jorge Montoya tendría en la mira, por tercer año consecutivo, que su bancada lidere la Mesa Directiva. A ello se le suma que Renovación Popular y Avanza País tendrían que dejar correr el agua debajo del puente para que el tema de adelanto de elecciones no le suponga un impedimento a la hora de sentarse a conversar con Fuerza Popular, que ahora debe responder por el pacto con Perú Libre por el defensor del pueblo. La izquierda tiende a capitalizar cuando en la derecha priman actitudes que distan de lo político.  

En el centro, aún indefinido, está APP. Su líder, César Acuña, consideraría que es el momento de su bancada de liderar la Mesa Directiva del Congreso, tras la censura a Lady Camones el año pasado. En caso esto no ocurra, Acuña esperaría tener prioridad en la distribución de comisiones. En Somos Perú, el bloque mayoritario estaría más interesado en la vicepresidencia del Congreso que se encarga del relacionamiento con gobiernos regionales y locales, pues son la fuerza política con el mayor posicionamiento en autoridades subnacionales.

El bloque de la izquierda, por su parte, podría tener la ventaja porque estaría liderado, principalmente, por Acción Popular, que busca la presidencia de la Mesa Directiva, nuevamente. Sin embargo, el acuerdo al que habría tenido que llegar Perú Libre con Fuerza Popular para obtener la Defensoría del Pueblo no ha calado bien del todo al interior de la bancada. Alex Flores, quien votó en contra de Josué Gutiérrez, había obtenido el visto bueno para ser el candidato de su bancada a la Mesa, para lo que estaba negociando con otros bloques. El supuesto acuerdo entre Fuerza Popular y Perú Libre lo dejaría sin piso, aunque hay una pequeña facción que insistirá en que PL forme parte de la coalición con Perú Bicentenario, Cambio Democrático, Bloque Magisterial, ‘Los Niños’, algunos no agrupados como Katy Ugarte y Enrique Alva, al que esperan sumar a Susel Paredes, Flor Pablo, Héctor Acuña y los hermanos Cordero Jon Tay.

¿Qué nombres suenan?:

En primer lugar, están los nombres que suenan desde el bloque democrático. Jorge Montoya insistiría en que lidere la Mesa Directiva un candidato de Renovación Popular. En ese sentido, se lo habrían propuesto a Gladys Echaíz, quien no tendría problema en asumir la candidatura; mientras que Alejandro Muñante habría iniciado una campaña de posicionamiento por su cuenta propia. Desde el lado de Fuerza Popular, la bancada podría estar en una posición de asumir el liderazgo de este bloque con una candidatura a la presidencia del Parlamento. Se conoce que al interior de la bancada están evaluando la posibilidad, y que Hernando Guerra García y Patricia Juárez podrían ser opciones.   

En el centro están las posturas indefinidas. Silvia Monteza, de Acción Popular, está buscando posicionarse con su bancada, pero está en negociaciones con los bloques de izquierda y de derecha. Para Monteza, podría existir la posibilidad de una Mesa Directiva presidida por ella, con Fuerza Popular en la primera vicepresidencia y Perú Libre en la segunda o tercera vicepresidencia. Sin embargo, la bancada Acción Popular se habría comprometido a apoyar la candidatura de Luis Aragón, por lo que no hay un consenso.

A Monteza le juega en contra la posición de su bancada, que cree que hay que remover a Renovación Popular, Avanza País y Fuerza Popular de una posible alianza. Si Aragón termina postulando sería con la coalición de la izquierda. 

Por parte de APP, Eduardo Salhuana asumiría el pedido de César Acuña de liderar las negociaciones para la Mesa Directiva, sin descartar liderar alguna lista. Lady Camones habría descartado querer repetir el plato del año pasado. Salhuana prefiere ser mucho más cauto y no anteponer su candidatura si es que no hay un bloque sólido con los votos que necesita, pero finalmente acataría la decisión del partido: si se presenta una lista única (en caso no lleguen a consenso con el bloque democrático), de abstenerse en la votación o, incluso, apoyar la lista del bloque democrático.

En una tercera esquina está el bloque revanchista, con sus fortalezas y debilidades. Si bien este bloque tendría más votos que la derecha, en número de integrantes, hay una fragmentación de candidatos que buscan presidir la Mesa Directiva. Por un lado, está José Balcázar, de Perú Bicentenario, que también se ha presentado en las elecciones pasadas. Luego está Carlos Zeballos, de Podemos Perú, asesorado por el excongresista Yonhy Lescano. En este caso, José Luna apoyaría la candidatura de Zeballos siempre y cuando le pueda asegurar que cuenta con los votos necesarios, pues de lo contrario, Zeballos deberá dar un paso al costado. Podemos Perú estaría, incluso, tratando de sumar a las congresistas de APP Rosío Torres y Magaly Ruiz a sus filas.

En esta esquina de la izquierda también está Esdras Medina, quien no tendría ningún problema en concertar con la derecha si le ofrecen alguna alianza, aunque con poca probabilidad pues se encargó de quemar puentes con Renovación Popular. Por último, y como se ha señalado, está Alex Flores, de Perú Libre, quien está bien posicionado al interior de la bancada, pero cuyo acuerdo sobre el defensor lo dejaría sin piso para una coalición con la izquierda. Por último, quien también tiene deseos de estar en la Mesa Directiva, aunque con cierta flexibilidad, es Óscar Zea, del Bloque Magisterial. El exministro de Agricultura de Pedro Castillo estaría interesado, en realidad, en cualquier vicepresidencia con tal de llegar a la Mesa Directiva. Finalmente, se trata de una izquierda que, no necesariamente, se mueve por ideologías. El Bloque Magisterial ha demostrado que, en ciertos temas, como el adelanto de elecciones, no tienen ningún problema en tener la misma postura que el sector más radical de la derecha.     

Otárola posicionado:

Por último, el presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, superó su crisis de inestabilidad en el gabinete y ha demostrado la buena interacción que ha tenido con las bancadas a la hora de promover el proyecto de ley que busca permitir que el presidente de la República dirija el despacho de manera remota en viajes al exterior. La iniciativa podría aprobarse en el Pleno con una buena votación. El Ejecutivo buscaría alinearse a la nueva Mesa Directiva para tener sostenibilidad hacia adelante en su gestión.