Contingencias imprevistas

Las preocupaciones en Palacio:

El Tribunal Constitucional ordenó esta semana, disponer de la inmediata libertad del expresidente Alberto Fujimori, lo que le ha supuesto una preocupación al gobierno de Boluarte. La Corte IDH instó al gobierno peruano a no proceder con dicha ejecución hasta verificar si la decisión cumplía con las condiciones necesarias. Esto le abrió dos escenarios al Ejecutivo. Por un lado, no ejecutar la orden del TC le suponía una repercusión en el Congreso, específicamente con Fuerza Popular, bancada que es clave para la sostenibilidad del gobierno. Por otro lado, desacatar la resolución de la Corte IDH le supone, al gobierno, una contingencia en el plano internacional. Sin embargo, un factor en común es que, el costo político, en cualquiera de los escenarios deberá ser asumido por el jefe del Gabinete, Alberto Otárola.    

En el plano local, un posible escenario es que se gesten movilizaciones en contra de la liberación de Alberto Fujimori que, finalmente, reactiven el pedido político de adelanto de elecciones. Esto teniendo en cuenta que es el anti-fujimorismo el movimiento que sí ha logrado concretar movilizaciones significativas en los últimos años. No obstante, para que este escenario se concrete, las movilizaciones tendrían que activarse de manera significativa.

Sin embargo, si se compara el actual momento con la coyuntura vivida en las movilizaciones de un año atrás, resaltan algunos factores que se mantienen y otros que han cambiado. Si bien Fuerza Popular se ha mostrado antes a favor de adelantar las elecciones, la reciente liberación de Alberto Fujimori abre un nuevo abanico de posibilidades para la próxima campaña electoral.

Lo que ha cambiado, y podría convencer a bancadas que se oponían, hace un año, al adelanto de elecciones, es que se han ido aprobando reformas políticas, como la bicameralidad (aprobada en primera votación) y los dictámenes aprobados en la Comisión de Constitución que ratifican el voto preferencial para congresistas y prescindir de la obligatoriedad de las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), así como la reelección inmediata de alcaldes y gobernadores.

El otro escenario es que las actuales autoridades nacionales se mantienen hasta el 2026. Este escenario es el que actualmente persiste, pues lo cierto es que ninguna de las autoridades que se tendría que ir, en un adelanto de elecciones, quiere en realidad dejar sus cargos.

La liberación del expresidente Fujimori no es la única preocupación para el Ejecutivo, que, con el cierre del año debe rendir cuentas del avance de la ejecución presupuestal y que se enfrenta al inminente inicio del Fenómeno de El Niño (FEN). En el contexto de la llegada del FEN, se podrían generar movilizaciones sociales de una ciudadanía que no ha visto soluciones y medidas para evitar nuevas emergencias en su zona. Además, en el Congreso, se ha dilatado el debate de proyectos de ley que tienden a generar una gran expectativa popular, aunque antitécnicos, como lo es un nuevo retiro de los fondos de las AFP. En anteriores ocasiones, cuando la clase política ha necesitado un salvavidas en popularidad, se aprobaron con celeridad.

Agenda parlamentaria recargada:

El Congreso intentó una nueva arremetida contra la Junta Nacional de Justicia, tras la crisis en la Fiscalía de la Nación y Ministerio Público. El congresista Esdras Medina promovió una nueva moción para investigar a los miembros de la JNJ, bajo el supuesto que, si la Junta podía realizar un proceso sumario contra Patricia Benavides, el Parlamento también podía hacer lo mismo con los integrantes de la JNJ. Sin embargo, el Pleno desestimó esta moción con 56 votos a favor, 38 en contra y 15 abstenciones, aunque está pendiente una reconsideración de la votación presentada por el vocero de Fuerza Popular, Eduardo Castillo.

Como es habitual, en el Parlamento primaría cierto desorden antes del fin de la actual legislatura, prevista para el 15 de diciembre. Para la siguiente semana se espera una agenda recargada y desordenada, donde cada congresista buscará ingresar sus temas de interés antes de cerrar el año. El cierre de la legislatura se debe seguir con especial atención pues proyectos enterrados podrían encontrar la oportunidad de llegar a debate en el Pleno.

A la interna del Congreso, se habría cuestionado severamente al presidente de la Comisión de Economía, César Revilla (Fuerza Popular), por su intento fallido de poner en agenda la Reforma del Sistema Previsional Peruano. Las críticas hacia Revilla señalan que el congresista no habría tenido un interés real en que la propuesta avance y que habría buscado bloquear los proyectos de retiros de 4 UIT. Los cuestionamientos podrían costarle a Fuerza Popular, pues no son solo de bancadas opositoras sino también de aliados, como Renovación Popular. La bancada celeste nunca recibió a bien que Fuerza Popular haya pretendido obviar el grupo de trabajo que evalúa la reforma del sistema previsional, presidido por Jorge Montoya.

Fiscal suspendida:

La crisis en la Fiscalía de la Nación ha tomado un nuevo giro luego de que la Junta Nacional de Justicia suspendiera provisionalmente, durante seis meses, a Patricia Benavides como fiscal suprema. Con esta decisión, deja el cargo de fiscal de la Nación, que ha sido asumido, de manera interina, por el fiscal supremo Pablo Sánchez.

Desde el inicio de su gestión, la ahora suspendida fiscal asumió un rol político, como lo ha confirmado en su presentación en la Comisión de Fiscalización, pues negó que existiera una organización criminal, “por el contrario, he luchado contra el uso político de la función fiscal. Esto es una venganza contra quienes realmente enfrentamos al poder de turno”, señaló. Incluso, la designación de Jorge del Castillo como su defensa evidencia su ángulo político, al igual que las portátiles que suelen apoyarla. No obstante, ninguna de estas acciones habría logrado evitar, finalmente, la suspensión provisional por la JNJ.    

¿Qué más complica a la ex fiscal de la Nación? Su asesor principal, Jaime Villanueva, ha logrado salir en libertad tras aceptar colaborar con la investigación en su contra. Como es usual con los colaboradores eficaces, podría salir a la luz información, de manera “oportuna”, en las siguientes semanas. La situación de Benavides también dependerá de qué tan extensa sea la telaraña tejida en el Congreso.