Agenda de preocupaciones para el Ejecutivo
Agenda de preocupaciones:
La próxima convocatoria a la Toma de Lima se estaría convirtiendo en la principal preocupación para el Ejecutivo. Dirigentes de asociaciones campesinas de las provincias del sur, como Cusco y Canchis, estarían confirmando que acatarán un paro seco este 19 de julio; mientras los dirigentes de las rondas campesinas del norte, como Cajamarca, Lambayeque, Piura y La Libertad, también han confirmado que participarán en las marchas. Los dirigentes estarían buscando concretar movilizaciones hacia Lima y realizar paralizaciones en las regiones, para generar una dinámica más esparcida y caótica. Además, el que no exista una agenda de demanda única, para todos los sectores que buscan plegarse a las movilizaciones, dificulta al Ejecutivo en poder encontrar soluciones que disminuyan el nivel de convocatoria.
La estrategia del gobierno, de cara a la Toma de Lima, se basa en una línea defensiva y una disuasiva. Sobre la primera, la Policía Nacional viene realizando controles de identidad en diferentes puntos en la carretera hacia Lima y el jefe del Gabinete, Alberto Otárola, anunció que en sesión de Consejo de Ministros se aprobó el decreto supremo que prorroga el Estado de Emergencia en la Red Vial Nacional, además de establecer el Estado de Emergencia en las redes viales regionales y locales. El gobierno buscaría adelantarse a posibles cierres en la carretera, como ocurrió en el pasado en La Libertad, Ayacucho, Junín e Ica, ocasionando paralizaciones por varios días a nivel nacional. Sin embargo, el Ejecutivo no podría mostrar todas sus cartas de acción de manera inmediata, pues podría tener un efecto rebote. Es decir, movilizar desde ahora a los militares podría ocasionar que más personas se sumen a la convocatoria, en rechazo a este tipo de acciones del gobierno.
Por su parte, como parte de las acciones en la línea de estrategia disuasiva, el Ejecutivo ha buscado espacios de reunión con diferentes actores. Los ministros de carteras como Comercio Exterior y Turismo, y Producción, se han reunido con gremios de sectores de turismo, exportación, micro y pequeña empresa para acordar un trabajo conjunto y buscar que estos sectores no se adhieran a las marchas. El ministro de Trabajo, por su parte, se reunió con más de 20 alcaldes de Puno, acordando hacer intervenciones de empleo temporal en todos los distritos de la región. La misma presidenta Boluarte sostuvo este jueves una segunda reunión con 11 alcaldes distritales de Puno y 3 de Cusco. Por último, como parte de acciones más integrales, el Consejo de Estado se reunirá este viernes con una agenda de sesión basada en la conflictividad en el Perú.
Por otro lado, la denuncia de presunto plagio del libro de coautoría de la presidenta Dina Boluarte se suma a estas preocupaciones para el Ejecutivo. De momento, la mandataria ha optado por permanecer alejada del foco de la atención y no responder, aún, directamente a las acusaciones. Esto ha ocasionado que Otárola sea quien dé la cara esta semana a los periodistas. Si bien el jefe del Gabinete ha señalado que están dispuestos a colaborar con las investigaciones, además de enfatizar sobre la integridad y ética de Boluarte, no ha sido capaz de rechazar, de manera rotunda, las acusaciones sobre plagio.
Por último, la falta de claridad sobre la próxima elección de la Mesa Directiva del Congreso tampoco le ofrece al Ejecutivo un panorama certero, de cara al próximo mensaje de 28 de julio. El gobierno de Boluarte aún no tendría claro con qué actores deberá buscar espacio de diálogo para seguir teniendo un buen entendimiento con el Congreso. Otárola ha señalado esta semana que la presidenta está enfocada en 3 temas: la estrategia de aplicación de la emergencia para El Niño Global, previsto para fin de año; atender de manera multisectorial las heladas y friaje; y la elaboración de su mensaje al Congreso de la República. Este último, en palabras de Otárola, será “un mensaje potente, fuerte, de afianzamiento a la peruanidad y va a reiterar el gran llamado a la unidad nacional”. Ciertamente, el tener que bajar el perfil por cuestionamientos de plagio, le resta a Boluarte la posibilidad de poder hacer anuncios públicos sobre su gestión antes de 28.