¿Tormenta política en el Parlamento?
¿Se avecina la tormenta?:
El actual Congreso parecería estar encaminado hacia su propia implosión política. El martes 8 de agosto, la bancada de Acción Popular perdió a más de la mitad de sus integrantes (8) en un lapso de 4 horas. Esta fracción se dio luego que Darwin Espinoza (implicado en el caso Los Niños y de manera reciente en el caso Sada Goray) fuera designado como vocero del grupo parlamentario para el nuevo período anual de sesiones. Una elección en la que, si bien ganó la facción de Los Niños, se precipitó la salida de militantes acciopopulistas de larga trayectoria del bloque parlamentario.
La fricción interna y las discrepancias en la bancada de la lampa no son nuevas, pues desde hace un tiempo las diferencias se evidenciaban incluso en las votaciones en el Pleno. Maricarmen Alva, Karol Paredes y Edwin Martínez votaron a favor de las denuncias constitucionales contra, sus entonces compañeros de bancada, Raúl Doroteo, Darwin Espinoza, Jorge Luis Flores y Elvis Vergara, en el informe final del caso Los Niños que presentó la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales. Incluso Alva y Paredes fueron designadas, sin su consentimiento, como miembros de la Comisión Permanente, con la intención de que no pudiesen votar en el Pleno. Sin embargo, la elección de Espinoza como vocero supuso el punto de quiebre para Maricarmen Alva, Edwin Martínez, Silvia Monteza, Karol Paredes, Juan Carlos Mori, José Arriola, Ílich López y Carlos Alva. En las diversas cartas de renuncia hay un sentimiento en común: “Nunca antes la representación partidaria había tocado fondo”, como manifestó Alva. A su vez, la bancada emitió un comunicado señalando que el grupo parlamentario se mantiene y mantendrá unido, en torno a los 7 que quedan, claro está.
La facción de Los Niños viene acumulando reveses en las últimas semanas. El primer golpe lo supuso el haber perdido posición respecto a la Alianza Bloque País, que actualmente preside la Mesa Directiva del Congreso. Los Niños perdieron a su aliado, Perú Libre, frente a su enemigo político, el fujimorismo, y una posibilidad de llegar a la Mesa Directiva. Ahora, estas renuncias le significaron a esta facción de Acción Popular una nueva distribución de comisiones en la Junta de Portavoces, perdiendo dos presidencias por el nuevo cálculo proporcional. La bancada pasó de ser la segunda fuerza en números en el Congreso, luego de Fuerza Popular, a ser el noveno grupo parlamentario, con solo 7 integrantes, tras aceptar las renuncias; mientras los no agrupados se convierten en la segunda minoría del Congreso con 17 parlamentarios.
Los Niños se despidieron de presidir las comisiones de Producción y de Ciencia, las que pasaron a manos de Fuerza Popular y Podemos Perú, respectivamente. Pareciera que cada revés para Los Niños le ha supuesto un fortalecimiento natural a Fuerza Popular. Esta última bancada cedería su espacio en la Comisión de Producción a los disidentes de Acción Popular. La nueva distribución de comisiones deberá ser ratificada este lunes 14 por el Consejo Directivo, en primer lugar, y por el Pleno del Congreso, en instancia final. También se aceptó las renuncias de experulibristas (Alex Flores, Alfredo Pariona, Jaime Quito, Silvana Robles y Víctor Cutipa) que ahora, mediante acción de amparo, buscan que se reconozca la creación de la bancada Nueva Constitución Socialista.
Sin embargo, la desazón que quedaría es que el Congreso, particularmente el actual, que suma a su autogenerada mala imagen la carga negativa que ha acumulado este poder del Estado en las últimas décadas, cava su propia fosa con lo que podría verse como un manejo antojadizo de la institución. Para los actuales congresistas, pareciera que “una crisis más qué importa”, sin calcular las consecuencias de normalizar una sobrevivencia en estado crítico.
A ello, se le suma la situación del presidente del Congreso, Alejandro Soto (APP), quien votó a favor de una ley que fija en un año el plazo máximo de suspensión de la prescripción de delitos, en mayo último. Luego, la defensa de Soto pidió aplicar el dispositivo legal para poder librarse del proceso judicial que afronta en el Cusco por estafa. Una de las más de 50 investigaciones fiscales abiertas por los delitos de estafa, apropiación ilícita, abuso de autoridad, enriquecimiento ilegal y corrupción, entre otros más. Soto ha señalado que no se aferra al cargo y estaría dispuesto a presentar su renuncia, por lo que podría convertirse en el segundo presidente del Congreso, también de APP, en no terminar el período anual de sesiones, incluso de manera consecutiva, abriendo un nuevo espacio de negociación cuyo resultado podría desconfigurar la actual correlación de fuerzas, sin un norte claro.
Respiro para el Ejecutivo:
El cisma ocurrido en Acción Popular esta semana junto con la situación del presidente del Congreso le otorgaron a la presidenta Boluarte, en el plano local, un buen margen de acción y respiro esta semana en la que pudo concretar su primer viaje internacional para la Cumbre de Presidentes de la Amazonía, en Brasil.
En el plano internacional, Boluarte se vio favorecida al tener a su opositor más crítico, quizás, como lo es el presidente de Colombia, Gustavo Petro, debilitado, acorralado y distraído por acusaciones de financiamiento ilícito a su campaña electoral. Petro, acostumbrado a persistir en el ámbito internacional en la narrativa de deslegitimar a Boluarte como presidenta de Perú, prefirió tener un perfil bajo y evitar confrontaciones políticas en este espacio. Boluarte, además, recibió el respaldo público del presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, fortaleciendo su imagen en el plano internacional. Todo ello, le supuso a la mandataria la oportunidad del retorno de la “diplomacia presidencial peruana”, como lo señaló el jefe del Gabinete, Alberto Otárola, en un foro simbólico donde Perú suscribió una alianza amazónica contra la deforestación.
Si bien este viaje le ha significado, hasta el momento, réditos para la presidenta, la salida del país bajo un mecanismo legal que es cuestionado le podría generar una contingencia en el corto y mediano plazo, especialmente por parte de sus detractores políticos en el Congreso. La bancada de Perú Libre anunció que ha comenzado a recolectar firmas para presentar una moción de vacancia contra la presidenta por este viaje, argumentando un traslado “inconstitucional”.