¿Evento canónico?
El peso para los Gobiernos Regionales:
Esta semana, el gobierno anunció, en el “Encuentro Intergubernamental: Preparación ante el Fenómeno El Niño (FEN)”, el presupuesto destinado para acciones de prevención en siete regiones. La presidenta Boluarte pidió a las autoridades subnacionales “hechos y no palabras” y enfatizó que la Contraloría General realizará un control concurrente a las inversiones que se efectuarán. Por su parte, el contralor Nelson Shack ha sido enfático en plantear la necesidad de sancionar con inhabilitación a los funcionarios que no ejecuten su presupuesto para la gestión de riesgos de desastres. Así, con los presupuestos garantizados, el peso de la prevención de riesgos del próximo FEN recaería principalmente en los gobernadores regionales.
Por un lado, el riesgo de esta presión de sanción, especialmente con autoridades que, usualmente, no tienen capacidad de ejecución ni equipos técnicos, no solo es que no se logren ejecutar las inversiones necesarias sino también que se inicie una ejecución de presupuesto sin una estrategia clara en el manejo de la prevención.
Por otro lado, el reciente evento podría perjudicar el posicionamiento que la presidenta Boluarte estaba tratando de lograr con las autoridades regionales. Boluarte ha destinado importantes esfuerzos para mantener una relación cordial y amigable con los gobernadores regionales para que, en caso de protestas en su contra, le supongan una primera barrera de contención.
Alianzas cortoplacistas, pero con riesgo para el futuro inmediato:
La Comisión Permanente del Congreso inició funciones. Aunque la sesión de esta semana no supuso un riesgo, es latente la contingencia que se puedan exonerar iniciativas de dictamen y de comisión, además de aprobar los temas que están en orden del día o agenda del Pleno.
Sin embargo, la agenda principal para julio gira en torno a las negociaciones de las fuerzas políticas para la elección de la nueva Mesa Directiva. ¿Cuáles son los antecedentes para tener en cuenta ahora? La derecha no ha logrado sostenerse por su cuenta en el actual Congreso y ha necesitado de los votos de fuerzas políticas de otras posiciones, principalmente del centro. La primera Mesa Directiva no se habría podido lograr sin Acción Popular; mientras que, la segunda, inicialmente, se logró gracias a Podemos Perú y Somos Perú. Estas dos últimas bancadas han ganado su propio peso y espacio, convirtiéndose en actores clave y logrando una mayor definición, incluso, que Acción Popular y Alianza para el Progreso. La correlación de fuerzas en el Congreso ha cambiado en los últimos dos años, en especial tras la atomización de bancadas, y la derecha ha dejado de ser el bloque que tenía el control y ejercía un contrapeso político. La izquierda, por su parte, siempre se ha fraccionado en varias listas.
Al día de hoy, tenemos una derecha en el Congreso que consideraría necesario lograr una alianza con una izquierda ideologizada, pero sobre la que espera poder ejercer cierto control, para lograr presidir la Mesa Directiva. La alianza estaría basada en la actual elección y en la distribución de las comisiones, pero no necesariamente sobreviva más allá de agosto, pues la correlación de fuerzas varía dependiendo de las negociaciones a la vista. Después de todo, es un Congreso con agendas e intereses más individuales que colectivos.
El principal riesgo que se abre con esta negociación derecha-izquierda es la distribución de las comisiones. El tener a la izquierda en la Mesa Directiva supone una negociación en las comisiones clave. No solo las ordinarias, sino también las de control político como la de Ética o la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales. ¿Qué comisiones estaría dispuesto Fuerza Popular a ceder a Perú Libre? Porque, ciertamente, si son vitales para que la bancada naranja logre presidir la Mesa Directiva, el grupo parlamentario del lápiz ya no estaría dispuesto a conformarse con las comisiones de menor importancia. ¿Buscaría Perú Libre presidir la Comisión de Producción nuevamente? ¿Estaría Fuerza Popular dispuesto a ceder la Comisión de Economía, en caso sea una de las demandas? Si bien podría luego no haber acuerdos para aprobar dictámenes o las votaciones en el Pleno, como se ha mencionado, el panorama es distinto con un factor de izquierda en la actual negociación, y obteniendo algún tipo de poder.
Si bien todo está aún en veremos, el secretario general de Perú Libre, Vladimir Cerrón, comunicó este viernes los acuerdos adoptados en la Asamblea Nacional Extraordinaria del partido. La bancada buscará participar en la candidatura de la Mesa Directiva con Waldemar Cerrón como candidato. La fórmula definitiva se aprobará en una segunda Asamblea Nacional Extraordinaria el 21 de julio. Este mes supondrá intensas negociaciones para las fuerzas políticas en el Congreso.